9 de diciembre de 2010

Paciencia, paciencia... (cosas que no me gustan de vivir con la Compi)

Copo,
La mayoría de personas que se entera de que vivo con una señora de 78 años y que además no es mi abuela, alucina pepinillos en primera instancia. Hay algunos que en segunda instancia me dicen que "no saben si ellos podrían". Hay gente que directamente que ellos ni hartos de vino se tirarían a la piscina de esta particular convivencia. 

Y lo puedo entender. Porque muchas veces me tengo que morder la lengua para no decirle a la compi cuatro cosas bien dichas. Porque hay momentos que si me pincharan sacarían veneno. Y que conste que yo me considero una persona bastante paciente. No es que sea María Teresa de Calculta, vale, pero aguanto lo mío. Aguanto algunas voces que no debería darme o aguanto que se meta en asuntos de mi vida que no le incumben... y ojo, no hablo de que viva en su casa como si fuera un hotel, no, yo hablo de que no tiene por qué saber todos los intríngulis de la vida de mi cuñada, por ejemplo. 

Ahí van las cosas que no me gustan de mi convivencia con la Compi: 
-No me gusta que me grite y me riña porque se me haya pegado la pasta, por ejemplo. 
-No me gusta que no me pregunte qué me apetece ver en la TV y que ella ponga algo que no me gusta y se duerma.
-No me gusta que no pueda darle el número de teléfono de la casa en la que convivo con ella para que nadie la llame pero que yo tenga que atender el teléfono cuando la llaman a ella, esté haciendo lo que esté haciendo. "Hola, Casa-compi, ¡¿dígame?!"
-No me gusta que esté obsesionada con los enchufes y los incendios
-No me gusta que no entienda que tengo familia y amigos a los que atender.
-No me gusta que no agradezca el sacrificio que me supone, en muchos sentidos, convivir con ella, por ejemplo.


Vaaaaaale, ¡ya paro! Pero es que hoy la señora ha tenido un buen arranque... pero ya está bien, señores. Que me he comido un mantecado y me ha dado un subidón de espíritu navideño. 

¡Salud!


6 comentarios:

  1. Debe ser, cuando menos, curioso. Yo no sé si podría vivir con alguna de mis abuelas o no, en cualquier caso estoy segura de que sería más facil que convivir con mis padres! jajaja

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  2. yo soy de las que digo que no podría, creo, ahora no.

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  3. Te entiendo perfectamente.
    Yo también me considero paciente y en la misma situación (peor en algunos casos, en cuanto a que la mujer tenía (y tiene) 90 años... y mejor en otros, seguramente (no era muy cotilla)), pero te entiendo.
    No me gustaba:
    -Que me reprochase que no hiciese cosas inimaginables (mover las cortinas del salón antes de irme a clase)
    -Que me llamase cada 10 minutos por cuestiones mínimas en plena época de exámenes.
    -Que me echase en cara que me tomase los fines de semana que me correspondían y me hiciese sentir culpable.
    -Sobre la tele y el teléfono, lo mismo. Excepto que yo no tenía que hacer de telefonista.

    Muchos días para recordar. Pero otros muchos... realmente desesperantes.
    Nunca es lo miso ir de visita o incluso vivir con un familiar al que le puedes "decir algunas cosas" =)

    ánimo!!

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  4. Yo, sencillamente, no podría..... me convertiría en asesina psicópata, seguro jajajajajajajaja

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  5. Eva: La cosa es que no es MI abuela... pero sin duda estoy contenta de la decisión de no vivir con mis padres para aventurarme en esto :D

    Cartafol: Espero que esta semiindependencia represente un pasito hacia lo que ya tienes tú!

    Irene: Yo creo que tú eres la única que me entiende de verdad Jajaja

    Xiao: La verdad es que a menudo tengo tics de asesina psicópata... voy en camino! Jajaja

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  6. Si, es verdad que esta señora tiene la extraña capacidad de hacerte sentir culpable por irte un sábado a tu casa.
    Es rara. Es mayor...

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¿Y tú qué le dices a Copo?