Querido Copo;
Lo sé, se rumorea que he estado ausente porque he estado realizándome una operación de cambio de sexo, que me he muerto de añoranza de la compi... pero ná de ná. Simplemente que una es:
- Sumamente despistada.
- Monitora de campamentos de verano.
Vaya, que he estado cuidando de 8 niñitas de cinco a siete años durante una semana y a este ritmo se me van a quitar las ganas de tener hijos, señores. Cuando tenían que ponerse el pijama... ¡¡qué horror!! ¿qué tenían en contra de dormir? Y por no hablar del momento de peinarse (osease, después de levantarse, de la piscina de la mañana, de la siesta y de la piscina de la tarde)... definitivamente ese momento era mortal... la primera niña en peinar como fuera muy creativa con su pedido (por ejemplo "trenza de espiga de lado") tenías que reproducir 7 veces más ese pedido porque todas querían lo mismo que esa niña... y yo con contracturas por trenzar cabezas Jajaja
Lo bueno es que de tantas horas de vigilar niñas con manguitos en la piscina me he puesto hasta morena.
Y no, no pienso retomar el ritmo del blog, pero es que señores y señoras, ¡estoy de vacaciones de todo! De todo menos de piojos, liendres, niñas con fiebre, niñas que me rogaban que las acompañase al baño a las tantas de las madrugada, etc.
Vamos, que no estoy por el blog, pero no me aburro... para pruebas gráficas, ¡vean aquí! Por lo demás, me marcho quince días más por ahí... ya contaré, ya...
¡Un abrazo!
No tengo ni idea de cómo se hacen las trenzas de espiga, a ver si me enseñas! jajaja
ResponderEliminarDale gracias a Dios por haberte dado un niño, Eva... yo siempre me he imaginado con hijas pero después de esta semana una se lo replantea todo! Jajaja
ResponderEliminarP.D.: Las trenzas de espiga tenían mucho éxito... tuve que peinar hasta las otras monitoras Jajaja
Aix Arroyito que bien vives!!!
ResponderEliminarPues nada sigue disfrutando del veranito.
Besos
Yo soy testigo de sus horas haciendo trencitas!! Pero lo que no ha contado era su manera sumamente particular de buscar piojos.
ResponderEliminarResulta que en una de las manualidades las niñas se embadurnaron en purpurina hasta el punto de ser mitad humanas mitad croquetas brillantes, a lo que la señorita decía: "Huy! Cuanta purpurina tienes! Deja que te la quite..."
JAJAJA Eso hay que vivirlo para disfrutarlo.
Un beso guapa!!
Aysss, lo mejor es buscar una niña sencillita o que hable poco... y ale, una coleta de caballo a todas y listo... y si puede ser bien recogidita en moño y así menos piojos... qué barbaridad... jeje ¿No te has planteado que quizás sea mejor dejar lo de maestra para dedicarte a la peluquería? Uffff y yo que siempre he querido niñas para poder peinar... me quitas las ganas... jaja
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