Mi verdadera vocación

Ay Copo,

Que sí, que sí, lo que yo te diga. Hoy he descubierto mi verdadera vocación: ser fiscal. Sí, señores, sí, estoy hecha una fiscal de los pies a la cabeza. No obstante, cabe explicar que todo ha sucedido muy extrañamente... vamos, que ha sido una de esas cosas que le ocurren a una y hacen que se pase el resto del día (o de la vida) pensando aquello de "¿de verdad eso me ha pasao a mí o lo he soñao?"... La historia no es equiparable a aquella, de hace un par de años, en la que queriendo ir a Granollers aparecí en Ocata tuve que ser acompañada por un vagabundo que vendía kleneex en los trenes (no es broma) hasta el lugar de su destino, con dos narices.

A lo que iba, que me enrollo y me voy por los cerros de Úbeda. La cosa ha venido porque el teacher de sociología ha dicho que hoy íbamos a realizar lo que él ha llamado un "juicio social". Vamos, que nos han dividido en tres grupos (somos unos 90 en clase) y a cada grupo nos han propuesto un caso. Dentro del grupo unos eran juez y asesores, defensa y fiscalía.... a mí me ha tocado ser fiscal. Lo cierto es que a mí me hacía ilusión ser juez, pero el teacher me ha dicho que tururú, que yo a la ficalía, ¡y puntoenboca! Jajaja

Total, que el caso que nos ha tocado a nosotros era brutal (y para colmo real): Una chica de 14 años había sido pillada robando en una tienda de lujo un vestido de 1.200 euros porque su familia, a pesar de estar en quiebra, se empeñaba a vivir en la clase alta. Lo mejor del caso era que la madre buscaba en la basura ropa de marca, recortaba el cocodrilo de Lacoste y se lo cosía con esmero a las hijas en los zapatos, ¡madredelamorhermoso! ¿existen las bambas de Lacoste? Jajaja Pero a lo que íbamos, que "la fiscalía" y yo hemos trabajado arduamente en un documento en el que se acusaba a la joven y se proponía una condena de internamiento en un centro de menores y blablabla...

Cuando ha llegado nuestro "juicio" a mí se me iba a salir el corazón de la camiseta... sí, señores, sí, me ha tocado ser la fiscal portavoz. Cuando la asesora de la juez ha dicho eso de "le cedemos el turno de palabra a la fiscalía" me he levantado en plan peli (a pesar de que las piernas me hacían "figa") y he empezado a leer el documento... con voz de fiscal, ¡claro! ¡La cuestión es que me he metido tanto en el papel que el "jurado popular" (el resto de la clase, vaya) me ha aplaudido y todo! Jajaja Ay, qué vergüenza... Jajaja "Señores, lamento no estar de acuerdo con la defensa. Pero tanto yo como el resto de la fiscalía cree que la menor..." Jajaja ¡Hemos tumbao a la defensa...!

Al final hemos ganado el "juicio" social, el jurado popular nos ha dado un apoyo masivo. Lo que yo diga, que iba pá fiscal... ¡y no sé por qué estoy haciendo magisterio infantil, oye! Jajaja Ay, pero es que no te he contado lo mejor, Copo, que cuando la juez (que estaba en una tarima y todo) ha dictado sentencia ha condenado a la chavala a "300 horas de trabajo a la comunidad", ¿hola? Jajaja ¡Que había que internarla en un centro de menores! Ais, menos mal que era un juicio ficticio que sino le monto un pollo a la juez y de paso le planto una demanda, Jajaja.

Por otro lado comentar que Sandra (la cual, por cierto, estaba en la defensa) ha prometido solemnemente que va a preguntarle al científico de peloenpecho cómo se llama... Jajaja Yo le he dicho que le enseñe su peloenpecho ella también, ¡que lo mismo surge el love y tenemos aquí una novela como las que le gustan a mi compi!

Y nada... que como no cambie el tiempo esta semana me va a tocar oler a chotillo, ¡porque veo complicado eso de lavar la ropa...!

Un abrazo y que tengáis una feliz semana :D

Arroyo (fiscal de menores Jajaja)